sábado, 29 de septiembre de 2012

Guía rápida de reconocimiento del alborotador


Cuidado con los alborotadores.

En la entrega de hoy y con la idea de ayudar a nuestro inestimable gobierno a localizar a los alborotadores, que quieren tomar el congreso en un intento de golpe de estado clarísimo, no sé cómo os indignáis de esta manera, porque está claro que son peligrosos. Vamos a aprender a localizarlos e identificarlos, para que nuestra maravillosa democracia, que nos representa y cuenta con nuestra opinión, siga adelante:

Signo número uno: El garrote.  El alborotador en cuestión intentará despistarnos con su leve cojera, pero no os dejéis engañar, es un arma con el que tomar la cámara y hacerse con el poder absoluto del país.

¡Cuidado! Lleva un palo largo!!!!

Signo número dos: El libro y muchísimo peor, la mochila (que puede llevar más de un libro). Imaginaos que es un libro, pero de los gordos y con tapas duras. Que nos dicen que se los van a estudiar, pero no, lo que pretenden es entrar en el congreso, abrirlo de golpe y gritar “quieto todo el mundo”.  Para morirse de miedo, ¡imaginaros que uno de estos insensatos sabe de derechos y se pone a leer! ¡Intolerable completamente! Reducidlos!!!!
Aquí los vemos en su guarida, organizándose para atacar.


Signo número tres: El carrito de la compra. Las portadoras de este arma de desorden público manifiesto, intentarán despistar nuestra atención forrando sus containers con flores de colores o estampados de cuadros de franela, pero ¡¡¡¡cuidado!!!!, pueden estar llenos de cócteles molotov o incluso peor! Naranjas, patatas y papel higiénico!!!! (¡las patatas nuevas rebotan contra el suelo, estad atentos!)

Signo número cuatro: Los rulos. Cuidadito con las mujeres que llevan rulos, van con intenciones malignas, en cualquier momento se puede quitar las horquillas y lanzarlas en un intento por acabar con las fuerzas y seguridad del estado y hacerse con el control central. Incluso hay radicales que combinan el carrito de la compra con el rulo mortal, a esas vigiladlas de cerca.

Verás la que voy a liar con el manojo de puerros pasado que acabo de pillar en Mercadona.

Signo número cinco: La cámara de fotos, la cámara de vídeo y el móvil. Los sujetos que portan estos elementos del mal, intentarán sacarte fotos y grabarte en vídeo y luego, sin remordimiento ninguno, distribuirán las imágenes. Ellos dicen que son trabajadores y abogan por la libertad de expresión e información, pero luego doblan las imágenes y te ponen voz de malo y ayudan a la señora de los rulos a perpetuar sus ataques.

Signo número seis: La pancarta. Este es uno de los más peligrosos, porque a veces se pone tan ingenioso que escribe cosas que no entiendes!.Y además hace que te esfuerces por descifrar cosas en clave que no tienen sentido. En realidad es un truco para despistar en un momento de esfuerzo mental y que el del libro pueda subir al estrado a abrir y cerrar las tapas de su libro gordo con letras pequeñitas. Cuidadito con este que es un listo.
¿Quien se ha muerto?- No se qué constitución, no se no la conocía.- Vaya, mi condolencia a la familia.

Aquí lo tienen miembros de este gran gobierno, siguiendo esta sencilla guía podrán identificar a toda esa mala gente que intenta desacreditarles, los provocadores, los alborotadores. Porque está claro que hay cosas que no son provocación: la subida del IVA, el recorte del bienestar social, las mentiras sistemáticas, la tomadura de pelo general a la población del país que te da de comer y te legitima en el puesto, el donde dije digo digo Diego, y la total impunidad con la que la clase política hace y deshace, a los ojos de todos, y no nos podemos quejar, porque están ahí porque los han votado. ¿Eso no son provocaciones, señores? No, a eso se le llama dictadura.